El sector hostelero andaluz se renueva gracias a la Red INNprende

Según la Federación Española de Hostelería y Restauración (FEHR), la hostelería y la restauración facturan en España más de 100 mil millones de euros anualmente, una importante porción del pastel del PIB nacional, que entidades como la Fundación Cruzcampo pretenden potenciar y modernizar a través de iniciativas como la Red INNprende, un foco de innovación para el sector turístico centrado en Andalucía.

Es complicado entender la cultura española si se desvincula de los sectores de la hostelería y la restauración: su gastronomía es famosa en el mundo entero; sus cocineros y chefs son grandes abanderados de la marca España; y sus bares, sus hoteles y sus restaurantes ven crecer su número de clientes en cuanto llega la época estival, generando riqueza y empleo derivados del turismo.

En 2014, los casi 290.000 establecimientos relacionados con estas actividades que funcionaban en el país facturaron cerca de 125 mil millones de euros. Éstos dieron trabajo a 1,4 millones de personas, según datos de la FEHR.

Con el fin de renovar el sector y mejorar estas cifras, la Fundación Cruzcampo lleva tres años fomentando su Red INNprende, una iniciativa que tiene como objetivo captar el talento y promover la innovación y el emprendimiento en este ámbito en la región andaluza. Se trata de un programa de aceleración empresarial dirigido a tres tipos de público: emprendedores y startups; pymes de menos de tres años; y nuevos proyectos impulsados desde empresas tractoras.

Los 21 proyectos que se han seleccionado este año están recibiendo apoyo de la Fundación para dar un empujón a su modelo de negocio, aportando nuevas perspectivas a su situación en el mercado y a su funcionamiento interno. En concreto, se les plantea un plan de trabajo de seis meses con sesiones tanto grupales como individuales en las que se fomenta la innovación y el networking entre ellos.

Además, en la edición de este año el proyecto vencedor recibirá un premio de 10.000 euros por parte de la Fundación Cruzcampo y otro de 50.000 euros concedido por el grupo de restauración Beer&Food, que trabaja en asociación con Heineken España, patrono único de la entidad responsable de INNprende.

Restauración colaborativa

Entre los últimos proyectos seleccionados hay varios con un modelo de negocio de corte social, apoyados en la economía colaborativa o que fomentan la generación de actividad y riqueza en entornos rurales, entre otros aspectos.

Meat&Eat es uno de ellos. Se trata de una plataforma colaborativa en el que convergen chefs, amantes del buen comer (los llamados foodies) y propietarios de locales. La idea es que las dos primeras partes se pongan de acuerdo para diseñar experiencias gastronómicas únicas que tengan lugar en un espacio aportado por los terceros.

“Chefs y cocineros tienen un papel fundamental. En esta plataforma pueden encontrar una ventana a la promoción y al autoempleo, y les brinda una oportunidad de innovación gastronómica e investigación con un público real”, explica Yanira Díaz, responsable del área comercial de la compañía.

Díaz apunta que, además, “satisfacemos las necesidades de estos foodies, para los cuales la gastronomía es un elemento clave para conocer culturas y modos de vida, y también una manera de socializar, probar y, a fin de cuentas, vivir nuevas experiencias”. Por último, la plataforma ofrece a los dueños de los espacios rentabilizar sus propiedades, de manera dinámica y por periodos cortos de tiempo.

En esta línea también se está desarrollando SocialFood, una red social de economía colaborativa donde los usuarios socializan comiendo en casa de particulares al mismo precio que comerían en su casa.

“Por un lado ayudamos a chefs anónimos a tener una marca digital reconocida por todos los miembros de la comunidad, así como un portfolio de su knowhow. Por otro, combatimos la soledad de las personas facilitándoles momentos únicos que compartir con más personas”, explica Álvaro Travesdo, cofundador de la iniciativa.

Según éste, la nueva red social, que ya cuenta con 12.000 usuarios, sirve como oportunidad para que los turistas vivan una experiencia culinaria en casa de una persona local. Por otra parte, es de gran utilidad para aquellos que tengan alguna sensibilidad alimenticia (veganos, vegetarianos, celíacos, diabéticos…) “puesto que encuentran en SocialFood una comunidad con sus mismas características”.

Otra de las iniciativas que se están desarrollando a través de INNprende es Trai, una plataforma que tiene como objetivo dar un impulso al entorno rural andaluz. “Nace a finales de 2015 a raíz de una conversación entre mi socio, Antonio, y yo en la que compartíamos las experiencias de nuestros viajes por Sudamérica y Sudeste asiático”, explica Samuel Álamo, cofundador de la empresa.

En aquel momento ambos se dieron cuenta de que los mejores momentos en aquellos destinos habían sido esos en los que coincidieron con locales, “que estaban encantados de enseñarnos su cultura. Sin embargo, acceder a ese tipo de experiencias es tremendamente complicado”, afirma Álamo.

Para facilitar ese tipo de encuentros y, a la vez, poner en valor los distintos entornos existentes en su tierra, Andalucía, crearon Trai. Aunque no quieren cerrarse sólo a esta comunidad autónoma: “En el futuro nos encantaría poder escuchar que alguien ha tenido una verdadera ‘experiencia trai’ en cualquier región de España o del mundo”, apunta el cofundador de la compañía.

Como herramienta diferenciadora, Trai quiere incluir el llamado ‘pago posterior’ (PWYW por sus siglas en inglés), de manera que los usuarios, después de realizar las actividades, las valoren y realicen un pago en consecuencia. “Con ello logramos que los anfitriones sólo compartan experiencias si realmente están apasionados por ellas, y que reciban una recompensa económica que, en muchos casos, supera sus expectativas”, asegura Álamo.

Por último, y también asociada al turismo rural, ha entrado a formar parte de la Red INNprende Puro Rural, una idea que surge de la colaboración entre una diplomada en Turismo y un desarrollador de aplicaciones móviles.

“Estuvimos investigando el mercado y nos percatamos de que el turismo rural y de interior estaba experimentando un auge entre la población, contando además con un gran apoyo de las instituciones públicas. Vimos una oportunidad para crear una comunidad o una red social que englobase tanto al turista como al profesional del sector”, explica Patricia Sastre, cofundadora y CEO de la compañía.

A través de esta plataforma, el viajero, que tiene un perfil determinado, puede compartir su experiencia (una estancia en una casa rural, un almuerzo en un asador, una ruta a caballo…) que otros usuarios de la red social podrán valorar y comentar. “De esta manera, se crea una comunidad entre ellos que les ayuda a planificar nuevas escapadas según las recomendaciones”, apunta Sastre.

A su vez, el profesional puede crear el perfil de su establecimiento, entrando en contacto directo con toda la comunidad de usuarios. “De esta manera, el turista cuenta con las experiencias de otros usuarios y un directorio específicamente rural con los que poder crear sus planes y el profesional tiene un gran escaparate a un público objetivo con el que podrá estar en contacto directo en cualquier momento”, concreta la CEO de Puro Rural.

Las tres experiencias, aun en una fase muy temprana, valoran muy positivamente su entrada en la Red INNprende. “Tenemos a nuestra disposición a un equipo de profesionales a los que jamás hubiéramos podido acceder, sesiones individualizadas en las que trabajamos exclusivamente las necesidades de nuestro proyecto, sesiones grupales en las que compartimos experiencias con el resto de iniciativas, charlas con profesionales especializados en diversas temáticas que conciernen a conceptos vitales para el desarrollo de la empresa, visibilidad en los medios…”, enumera Patricia Sastre.

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