La reputación y la red
La empresas son cada vez más conscientes de la importancia que tiene la red para valorar la percepción e imagen que se tiene de ella. Hasta el momento el analisis de la percepción externa de la empresa se venía realizando a través de encuestas a diferentes públicos, que expresaban su opinión y valoración sobre la empresa de acuerdo con determinadas categorías o contenidos. Un ejemplo de este tipo es el Reptrack desarrollado por el Reputation Institute o el Merco elaborado por Villafañe. Pero la opinión en la red, como decimos, va ganando puntos y su auge ha impulsado el nacimiento de un nuevo sector de consultoría: la gestión de la imagen en Internet u ORM (por sus siglas en inglés Online Reputation Management).
Ya existen un grupo importante de empresas que, o bien son de nueva creación como Oerreeme, o bien son unidades de negocio de una empresa de comunicación, como Llorente&Cuenca o de una empresa de marketing y publicidad, como Territorio Creativo. En todos los casos el procedimiento que utilizan estas compañías para evaluar la imagen y reputación de las empresas en la red es similar. Primero se busca lo que «se dice» en la red de la empresa en cuestión, incluyendo en ese «qué» no sólo los portales de los medios de comunicación tradicionales sino los blogs, wikis, redes sociales, foros, etc., que constituyen ya el 26% de los contenidos en la red. Una vez recogido lo «que» se dice, comienza una segunda etapa de depuración, en la que se seleccionan los contenidos con mayor impacto en la red por su influencia y alcance.
Por último, cuando ya se tiene la fotografía de la red, en función de los resultados, la empresa puede desarrollar una campaña para intentar mejorar su imagen en la red situando sus mensajes en un lugar accesible y visible para los internautas. Todavía no se conoce bien el impacto y la trascendencia que tienen Internet en la imagen y reputación de las empresas, pero casi todo el mundo tiene muy claro que es un medio cuya influencia aumentará cada día, de ahí la urgencia en moverse cuanto antes.
