Cervezas y datos, el invento español para impulsar la transparencia en el siglo XXI

El desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación a principios del año 2000 han revolucionado la comunicación humana y la forma de relacionarse con el mundo. De hecho, los expertos afirman que la sociedad actual está viviendo la Cuarta Revolución Industrial, marcada por el conocimiento que generan los datos procedentes de la interactuación de los usuarios.
<p>Foto: Databeers.</p>

Foto: Databeers.

En la actualidad, los datos han cobrado tal importancia que se consideran “el petróleo del siglo XXI”, ya que suponen un gran beneficio para quien sabe entenderlos e interpretarlos. Una gestión adecuada del big data puede tener muchas ventajas en todos los sectores de la sociedad, aunque todavía existe bastante desconocimiento y miedo sobre el manejo de grandes cantidades de información.

Por este motivo, surgió una iniciativa española que cuenta con miles de seguidores en todo el mundo: los Databeers, que comenzaron en el año 2015 en Madrid en el seno del MediaLab Prado, bajo el lema “be data, my friend y bebe beers”. Esta iniciativa consiste en el encuentro de diversos perfiles con un interés común: hablar de datos en un ambiente informal.

En la actualidad hay más de cien Databeers repartidos por España y el mundo; desde Madrid donde se inició el movimiento pasando por Bilbao, Sevilla, Almería, Buenos Aires, Boston, Bruselas, Dublín, Londres, Manila, Medellín, Turín, entre otras ciudades.

Revista Haz habla con María Sánchez González, organizadora de Databeers Málaga y profesora de periodismo en la Universidad de Málaga y la Universidad Internacional de Andalucía, para conocer más detalles de estos eventos y saber cómo unas cervezas ayudan a impulsar la transparencia dentro y fuera de España.

Cómo pasar del big al small data

El objetivo de estos encuentros es conectar a personas con conocimientos e interés por los datos, poner en valor proyectos, dar a conocer iniciativas e ideas, inspirar a otras personas y crear espacios de diálogo para los nuevos perfiles profesionales que no tiene un lugar donde ir a reunirse.

En este sentido, Sánchez explica que la idea es “crear una comunidad abierta” para hacer una labor de divulgación y transferencia de conocimiento sobre los datos de manera cercana e informal, para que un tema que puede resultar complejo, explicado de la forma adecuada resulte más sencillo.

El ambiente informal de estos encuentros es un elemento importante debido a que el tema de los datos no contaba con eventos propios y los pocos que había tenían un formato clásico y muy técnico, siendo poco colaborativos y abiertos. En este sentido, Sánchez afirma que la principal ventaja del Databeers es que “cualquier persona puede proponer charlas, presentarse a la comunidad, anunciar otros eventos que sean de interés y difundir conocimiento”.

Para participar en esta comunidad solo hay que cumplir unas normas básicas: no están permitidos las fórmulas o teoremas; debe hablarse de proyectos relacionados con los datos; las charlas deben durar siete minutos y exponer veinte diapositivas como máximo, y deben ser divertidas, siendo “vitales” el uso del humor y de GIFS animados.

“Dentro del mundo big data siempre se conoce al analista, pero hay muchos otros perfiles”, afirma Sánchez, que además señala: “cuando nació la idea en Madrid se creó pensando en un encuentro informal, basado en charlas divulgativas sobre datos y sus distintas aplicaciones, como el análisis, el big data, las visualizaciones y, sobre todo, el tema del small data, que es cómo los ciudadanos pueden utilizar el big data para obtener información para la toma de sus decisiones”.

<p>María Sánchez González, organizadora de Databeers Málaga. Foto: Koke Pérez.</p>

María Sánchez González, organizadora de Databeers Málaga. Foto: Koke Pérez.

Databeers y transparencia

Un tema destacado en la actualidad es el open data, una de las especializaciones dentro del mundo de los datos. Sobre este aspecto, Sánchez explica que han tenido muchas charlas sobre este tema, el más relacionado con la transparencia y destaca que es muy importante dentro de la comunidad porque “no solo se trata de promover la transparencia, sino de hacer posible la apropiación ciudadana de los datos”.

Gracias a la Ley de transparencia se han puesto a disposición de la ciudadanía grandes cantidades de datos en abierto, y la labor didáctica de los Databeers es “traducir el big data y los datos en abierto en el small data”, mostrando a los usuarios qué pueden hacer con ellos y qué cosas interesantes se están haciendo ya.

El último Databeers Málaga celebrado en marzo, tuvo varias charlas que trataban la utilidad de los portales de datos abiertos de algunos ayuntamientos e instituciones, ofreciendo las dos perspectivas.

Por un lado, los gestores de los portales aportaron la utilidad de su labor, y por otro, se presentó la experiencia de una profesora de la Universidad de la Valencia, responsable de la cátedra de gobierno abierto, para explicar cómo sus estudiantes habían utilizado los datos del portal del Ayuntamiento de Valencia para hacer sus propios sistemas de consulta y de visualización de datos.

Asimismo, Sánchez explica que los Databeers también son una buena fórmula para fomentar la colaboración con el sector público y privado, para impulsar el conocimiento y el intercambio de ideas, señalando que, en general, “las instituciones públicas suelen colaborar en la organización de los Databeers en cada ciudad”.

En el caso del Ayuntamiento de Málaga que patrocina la organización de los Databeers en la ciudad andaluza, la colaboración con el consistorio no se agota en estos eventos y Sánchez destaca otras acciones en las que han colaborado fuera de la comunidad de beers, como el concurso que realizó el Ayuntamiento malagueño para promover la utilización de los datos públicos entre los ciudadanos, para el que fue convocada como parte del jurado.

“La gente hizo cosas muy interesantes, desde aplicaciones hasta visualizaciones y webs, y aunque las colaboraciones varían dependiendo de la ciudad, siempre hay alguna pública y privada”, afirma la experta.

<p>Foto: Databeers.</p>

Foto: Databeers.

Innovando con un par de cervezas

El ambiente informal que rodea el evento de los Databeers no debe despistar a los interesados en conocer las ventajas del manejo y conocimiento de los datos de manera profesional. En este sentido, Sánchez confiesa a Revista Haz que cuando comenzó con la organización de los primeros Databeers, “su principal miedo” era que el carácter abierto y gratuito del evento condicionara el valor profesional y didáctico de las charlas, es decir, “que la gente venga a beber cerveza y que no le interesen los datos”.

Sin embargo, en 14 eventos celebrados han demostrado todo lo contrario: la percepción es que los asistentes valoran mucho más la cercanía con los ponentes y que la gente está cansada “de eventos clásicos con corbata”, donde no se puede debatir o hablar tranquilamente sobre temas de interés común.

Sánchez explica que el público que acude siempre es respetuoso y muy agradecido, aunque le sorprende “que mucha gente no sabía qué era el big data hasta que han venido a un Databeers y han visto las utilidades tanto a nivel personal, como profesional”.

Sobre este aspecto, Sánchez insiste en que la visualización de datos es una parte que tratan mucho en los Databeers, porque es una de las formas más didáctica para mostrar la información para cualquier persona. Como profesora de periodismo, es consciente de la importancia que tiene la información visual en el contexto actual, sobre todo para llegar a públicos que no son expertos. “Presentar los datos de forma más visual permite entender mejor las cosas y la realidad, haciendo la información más atractiva”, explica la experta.

Por este motivo, Sánchez insiste en la importancia de dar a conocer el small data y cómo los ciudadanos pueden utilizar el big data para obtener información que mejore su toma de decisiones y, por tanto, tener mayor calidad de vida, mientras que las instituciones, gracias a los datos pueden hacer una “escucha activa” de los comportamientos del usuario, midiendo en tiempo real esos comportamientos para corregir y adaptarse a las necesidades de los usuarios, ya que gracias a la transparencia hay mucha información disponible, pero si no sabe leer, manejar ni entender, no sirve de nada o resulta muy poco útil.
 

Comentarios